Teorías de la conspiración: Desastres provocados, HAARP

Las siglas HAARP son las iniciales en inglés del llamado “Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia”, un proyecto desarrollado y financiado por la Fuerza Aérea y la Marina de Estados Unidos, la Universidad de Alaska y la Agencia de Proyectos Avanzados de Investigación para la defensa (DARPA por sus siglas en inglés). Su objetivo es el estudio de la ionosfera, la sección de la atmosfera terrestre cargada de iones a consecuencia de la radiación solar. El funcionamiento desde 1993, su objetivo inicial fue estudiar el agujero en la capa de ozono y después derivó en la búsqueda de avances tecnológicos para fomentar los sistemas de vigilancia y las radiocomunicaciones. Su principal estación de trabajo se encuentra en Gakona, Alaska, cerca del Parque Nacional Wrangell-San Elías. La mayor parte de sus actividades son secretas.

Desde los primeros pasos de su desarrollo surgieron diversas teorías de conspiración, de acuerdo con las cuales  HAARP encubre sus verdaderos propósitos. A inicios de los años noventa el Parlamento Ruso consideró, que sus antenas podrían usarse como armamento para influir en la troposfera con ondas de baja frecuencia. Las teorías más aventuradas, sostienen que su propósito es provocar desastres naturales mediante la emisión de energía, es decir, que se trata de un arma geológica capaz de originar cambios climáticos y hasta terremotos.

Las versiones más extremas, expuestas por el periodista español activo en Londres Daniel del Pino, actual colaborador del periódico romano Público, aseguran que el sismo que devastó Haití en el 2010 fue el resultado de una prueba del proyecto HAARP, idea muy difundida en las redes sociales. El mismo autor menciona otras teorías: HAARP podría tener como objetivo la modificación de las condiciones atmosféricas, la redirección de asteroides contra flotas enemigas, el ataque a los ecosistemas y la producción de erupciones volcánicas, acciones que el investigador Arthur Westling clasifica como “las armas del futuro” (o Future Warfare). La teoría más absurda y ambiciosa asegura que Barack Obama, usa HAARP para recrear en Haití las “Diez Plagas de Egipto” mencionadas en el Antiguo Testamento.