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5 de diciembre de 2011

Destino Desconocido: Desapariciones misteriosas


Francisco de Orellana
1511-1546
Fue un explorador y conquistador español en la época de la colonización española de América. Participó en la conquista del imperio inca y, en lo posterior, fue nombrado gobernador en diversas poblaciones. Tras la cantidad de saqueos que dirigió hacia poblaciones nativas, se le consideró como uno de los conquistadores más ricos de la época.
Orellana era un íntimo de la familia de Francisco Pizarro. Viajó al Nuevo Mundo muy joven (1527), sirviendo en Nicaragua. Reforzó el ejército de Pizarro en el Perú (1535) y le sirvió en múltiples campañas, en una de las cuales perdió un ojo.
Durante la guerra civil entre los conquistadores en el Perú, se alineó con los Pizarro y fue enviado por Francisco Pizarro al mando de una columna desde Lima en ayuda de Hernando Pizarro. En 1538 fue nombrado gobernador de la provincia de la Culata, en la costa del actual Ecuador, donde reconstruyó y repobló Santiago de Guayaquil, que había sido recientemente destruida por los indios, anteriormente fundada por Pizarro y repoblada por Belalcázar.
Cruzaron los Andes. Al cabo de un año, ante la falta de resultados de la búsqueda, Gonzalo Pizarro y Orellana construyeron un bergantín, el San Pedro, para transportar a los heridos y los suministros, y siguieron los cursos de los ríos Coca y Napo hasta la confluencia de éste con el Aguarico y el Curaray, donde se encontraron faltos de provisiones. Habían perdido 140 de los 220 españoles y 3.000 de los 4.000 indios que componían la expedición. Acordaron entonces (22 de febrero de 1542) que Orellana prosiguiera en el barco en busca de alimentos río abajo. Le acompañaban unos cincuenta hombres. Incapaz de remontar el río, Orellana esperó a Pizarro. Finalmente envió a tres hombres con un mensaje y comenzó la construcción de un nuevo bergantín, elVictoria. Mientras tanto, Pizarro había vuelto hacia Quito por una ruta más hacia el norte, con sólo 80 hombres, los que quedaban vivos.
Orellana siguió río abajo. Al cabo de siete meses y un viaje de 4800 kilómetros, en los que navegó río abajo por el río Napo, el Trinidad, el río Negro (bautizado por Orellana) y el Amazonas, llegó a su desembocadura (26 de agosto de 1542), y desde allí se dirigió costeando a Nueva Cádiz en Cubagua (actual Venezuela). La Victoria, llevando a Orellana y Carvajal, bordeó la isla de Trinidad por el sur y quedó varada en el golfo de Paria durante siete días, llegando finalmente a Cubagua el 11 de septiembre de 1542.
Fue en este viaje en el que el Amazonas adquirió su nombre. Se cuenta que la expedición fue atacada por feroces mujeres guerreras, similares a las amazonas de la mitología griega, pero es posible que simplemente luchara contra guerreros indígenas de pelo largo. Sin embargo, las crónicas del Padre Gaspar de Carvajal, cronista de Orellana deja muy claro que los indígenas que les combatieron estaba liderados por mujeres.
Tras sobrevivir a la travesía del viaje por la Amazonia, partió de regreso a España en 1543 donde fue acusado de traición por cargos presentados por Pizarro. Luego de ser absuelto, organizó otra expedición, pero no contó con el capital ni con la aprobación, por esta razón se dedicó a la piratería y se dirigió nuevamente al Amazonas.
En 1546, mientras intentaban hallar el canal principal, sólo sobrevivieron 44 de los 300 expedicionarios. La mayoría fueron atacados por los indígenas con flechas envenenadas. El lugar, las circunstancias y la fecha precisa de su muerte aún se desconocen.

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